La obra artística orfébrica de Sara Jaramillo se inspira en la contemplación de lo ancestral mítico de nuestras raíces indigenistas, bajo un particular enfoque de expresión artística ya que toma como medio la orfebrería. Ella nos remite a lo perenne, a lo trascendental, haciendo que los efectos y aportes creativos y singulares de su arte, permanezcan asociados al contenido antiguo, transformado con su autosuficiencia de lenguaje y forma. La fuerza de sus obras en su contexto espacial y funcional como escultura y orfebrería son los hilos conductores para preciar la relación de la obra con su entorno y fin. Ella retiene el tiempo de los fósiles, las puntas de fechas de guerreros de culturas primitivas como espacio antropológico que funciona al mismo tiempo como registro de conciencia y como puesta al día con la contemporaneidad. El aspecto mágico-religioso, como punto de partida, da origen a una nueva religiosidad, donde se valora las arcanas creencias en función de las nuevas exigencias de estima y consideración de las mismas. Conlleva un discurso que se inspira en la energía de las gemas, el sentimiento de lo grandioso y de lo majestuoso, la emoción primitiva de chamanes y de los mismos objetos fantásticos. Lo psicológico, lo onírico, lidian con el paso del tiempo y sus transformaciones, se vuelca en obras en un contexto, donde arte significa nueva experimentación sociológica y reivindicaciones de derechos para realizar un nueva transustanciación artística en orden a lo puramente estético de hoy. Su lenguaje orfébrico se expresa en las infinitas posibilidades de la representación simbólica de objetos, que emergen con alta calidad en sus formas, frutos del rigor tecnológico en variadas aplicaciones. Todo funciona como estrategia en la comprensión de esa heterogeneidad de elementos, abierta al impulso creador de Sara Jaramillo.
Las obras de orfebrería, generalmente de pequeños formatos, nos muestran una madurez para llegar a composiciones equilibradas, exquisitas en su elaboración y con un contenido esencialmente latino, colmada por un refinamiento técnico. Son obras espirituales, cargadas de historia y de majestad. Su obra está cargada de investigación, destreza técnica, solidez conceptual, que juega con la modernidad, para convertirse en un disfrute de la belleza y placer para el espectador. Restos de fósiles hacen parte del trabajo que ha sido decantado para llegar a una composición colmada de refinamiento, técnica y creatividad. El lenguaje abstracto juega con el figurativo subvirtiendo el lenguaje con destreza y solidez conceptual. El resultado es una selección ecléctica en metales, piedras y recursos por parte de la artista y por parte del público una vivencia estética y un encuentro con una obra estimulante y enriquecedora.
La épica belleza de joyas y de piezas sublimes, su brillo deslumbrante en pequeña escala, crean un tono poético intenso y conmovedor en medio de la gran variedad de piezas. La búsqueda de una nueva visualidad y como expresión del sentido social del arte hace que la obra de la artista entra en contacto con un momento histórico específico donde la orfebrería en Venezuela está ocupando un lugar de prestigio, muy merecido por la alta calidad de sus obras y el gran empeño de sus artistas en elaborar obras de tan singular calidad plástica como es la obra orfébrica de Sara Jaramillo.
Escrito realizado por Orlando Campos. Curador y Critico de Arte.